Wulai es un bonito pueblo situado en las montañas, a tan solo 1h de Taipei. Es muy famoso por sus aguas termales, el color azul turquesa de su río y su Old Street. Os recomendamos ir por la mañana, hacer un pequeño paseo hasta las cascadas, subir en teleférico hasta el parque de atracciones de YunShien (solo si vais con niños, si no no merece mucho la pena), volver a comer en la Old Street y bañaros en el río o en las aguas termales por la tarde.
Cómo llegar a Wulai: llegar a Wulai es fácil desde Taipei y puede hacerse incluso en transporte público. Para ello, tenéis que ir hasta la estación de MRT de Xindian (última de la línea verde) y allí tomar el autobús 849 que os lleva a Wulai (40min, 15 NTD). Pero os avisamos de que hay muchas curvas, el autobús va muy lleno el fin de semana y es posible que tengáis que ir de pie. Si sois de marearos, mejor ir en vuestro propio coche, o si no tenéis, tomar un taxi en la estación de Xindian hasta Wulai (30min, 680 NTD). También en Xindian podéis coger una de las motos compartidas de WeMo si estáis dados de alta, pero recordar que ha de estar llena (ha de tener más de 30km disponibles) y que tenéis que comprar el pase de 6h como mínimo (250 NTD). Una vez en Wulai, podéis moveros tranquilamente a pie.
Qué hacer en Wulai:
Esta es la ruta que os proponemos por Wulai:
El autobús os dejará al principio de la Old Street (allí también tenéis un parking por si vais en transporte privado). Atravesar la Old Street (si es hora de comer, coger ya aquí cosas para hacer un picnic, ver más información abajo) y luego cruzar el Puente Lansheng. Las vistas desde aquí son preciosas, y la parte con suelo de cristal es muy chula para los niños.
Al final del puente, girar a la izquierda y empezar a caminar por el camino al costado del río Nanshi. Son unos 20min de paseo sencillo y muy escénico hasta las cascadas. Si no queréis caminar, al final del puente hay un pequeño trenecito (Wulai Log Cart) que os puede llevar hasta allí por 50 NTD pp (30 NTD niños). A los niños les suele gustar bastante, así que si no es a la ida, os recomendamos tomarlo a la vuelta.
Por el camino a la cascada, cuando acabéis la zona de hoteles, veréis que hay un parking a mano izquierda, aquí hay una bajada al río y los fines de semana vienen locales a hacer barbacoas y a bañarse en el río, ya que hay aguas termales. Podéis probar a ver si las encontráis.
Una vez en la zona de observación de la cascada, hay un mirador que está donde los aseos públicos, éste es el que tiene mejores vistas a las Cascadas de Wulai y podéis hacer un pequeño picnic aquí.
Lo siguiente que podéis hacer es tomar el teleférico (gondola) que va al parque de atracciones de YunShien (220 NTD ida y vuelta, 150 NTD niños). Es un poco caro para lo que es, pero las vistas son bonitas y pasa justo por encima de la cascada, es bastante original.
El Parque de Atracciones de YunShien está un poco abandonado, y solo tiene un par de cosillas que a los niños más pequeños gustará, pero si habéis llegado pronto y tebéis todo el día por delante, es curioso de ver (50 NTD pp). Allí hay un lago en el que podéis alquilar barquitas (150 NTD para 4 personas), columpios, estanque con cisnes, una especie de cochecitos de choque (50 NTD), e innumerables puentes para cruzar.
Bajar de nuevo en el teleférico y volver a la Old Street ya sea a pie o en el trenecito. Aquí podéis comer comida aborigen (Wulai es muy conocida porque aqui vive la tribu Tayal, que tiene algunas especialidades culinarias). Son super famosas las salchichas aborígenes echas de carne de jabalí (los mejores puestos están al final de la Old Street, donde el puente de Lansheng, tened en cuenta que son tirando a dulces). También muy populares los tubos de bamboo rellenos de arroz. Y de postre encontraréis unos mochis buenísimos, nuestros favoritos los de sésamo y los de cacahuete (no somos muy fans de los de taro o judías rojas). Si preferís sentaros en un restaurante, son todos muy parecidos. Entonces tenéis que probar las gambitas y el pescado frito, y los vegetales salteados.
Si es verano y hace buen día, los locales van a bañarse al río, a la zona que está delante del Elementary School. Para llegar, tenéis que volver al principio de la Old Street, y antes de cruzar el puente hacia el parking, girar a mano derecha. Pronto veréis bajadas hacia el río. Hay carteles que ponen que el baño está prohibido, pero esto es porque no hay vigilante, ya veréis que los locales se bañan aquí. Eso sí, cuidado con la corriente y los niños pequeños, sólo meteros si sois buenos nadadores.
Pero lo verdaderamente auténtico de Wulai con las Aguas Termales. Antiguamente, había unos baños públicos al lado del Puente Lansheng (cruzando desde la Old Street, a mano derecha), pero eran tan populares que la cosa empezó a degradarse y finalmente los han prohibido. Hoy en día, aún es posible bañarse en otro sitio pero es más salvaje y has de ir probando para encontrar el agua caliente. Es una sección del río que está en el camino a las cascadas, cuando se acaban los hoteles y hay un parking delante del río. Por aquí suelen haber locales los fines de semana haciendo barbacoas, y es posible encontrar corrientes de agua caliente.
Pero si queréis asegurar el tiro y tener una experiencia más privada, entonces lo que se lleva es alquilar una habitación privada con una bañera en uno de los numerosos hoteles. El centro del pueblo está lleno de estos hoteles, pero la verdad es que son un poco cutres. Los mejores hoteles están en la carretera que llega al pueblo, y algunos tienen preciosas vistas a la parte en la que el río tiene el agua de color turquesa. A nosotros nos encantó el Volando Urai (1300-1600 NTD por hora, menores de 130cm gratis, ver precios). Es mejor reservar previamente enviándoles un email. Pedidles una Grand View Bathhouse para el día y la hora que queráis. (Los grandes hoteles tienen también baños públicos que son algo más baratos, pero están separados por hombres y mujeres, no se puede usar bañador y no admiten niños). Para llegar al hotel podéis caminar 1km desde la Old Street (10min), coger un taxi (5min) o tomar el autobús y bajar en la segunda parada.