Si hace calor, en la Rua do Carmo 9 está el Santini (ver opiniones en Trip Advisor). Los portugueses lo dicen sin rubor: la mejor heladería de Lisboa y posiblemente del mundo. Hombre, igual se han pasado un par de tranvías pero bueno está. Eso sí, hay que pagarlo a unos 2€ la bola a elegir entre sus numerosos sabores... probad el que más os apetezca, pero ya os decimos que el de canela, está de vicio.
Y si hace frío y como que no entra un helado, entonces os recomendamos ir a la Rua Crucifixo (bajo los Armazens do Chiado, donde llegan los ascensores). Entre los más tradicionales tenéis la Pastelaria Baixa Do Chiado (Rua Crucifixo 94, justo delante del metro de Chiado). Aquí podéis tomar un buen café con un tradicional bolo (pastel).