Una vez salgáis del barrio de los museos, comenzar a recorrer hacia el norte la calle Nieuwe Spiegelstraat, la llamada calle de los anticuarios. Si es un día de invierno, no dejéis de hacer una visita al cercano Café de Wetering (Weteringstraat 37, entre Tweede Weteringdwarsstraat y Derde Weteringdwarsstraat). Un local casi escondido y concurrido por locales donde podréis disfrutar de un café delante de la chimenea que hay en su planta superior.