Antiguo pueblo de pescadores y guerreros, Saint Tropez es hoy sinónimo de glamour y lujo. Un pueblo encantador dedicado a los millonarios que llegan con sus yates, pero aún así accesible para el resto de mortales. Muy bien cuidado y con bonitas tiendas. Recomendamos visitarlo un día y perderse por su casco antiguo. Nos encantan las fachadas pintadas en colores ocres de sus casas y sus grandes y coloridas contraventanas. Como curiosidad, contaros que muchas de las plantas bajas, hoy reconvertidas en tiendas, comercios o restaurantes, era donde antiguamente guardaban los pescadores sus barcas. Saint Tropez