Salir de la plaza por la Rue de Birague y girar a la izquierda en la Rue Saint Antoine, que desemboca en la Plaza de la Bastilla.
En este lugar se encontraba la fortaleza de la Bastilla de San Antón, antiguo enclave estratégico de defensa para la ciudad, que posteriormente pasó a ser prisión estatal. Es el mayor símbolo de la Revolución Francesa, ya que fue aquí sonde tuvo lugar el asalto a la cárcel de la Bastilla en 1789, que dio comienzo a la revolución más famosa de todos los tiempos. Derruida posteriormente, hoy queda en su lugar la Columna de Julio, que representa la libertad del pueblo francés.