Cuando la marea baja en Moreré, se forman aquí piscinas naturales color turquesa. Hay unas más cercanas a la costa, que suelen estar más tranquilas. Y otras más grandes que son a las que llegan los barcos y se llenan de gente cuando coinciden las distintas barcas. Merece la pena conocer ambas. En cualquier caso, cuando bajéis de la lancha no olvidéis llevaros la cartera, porque lo mejor sin duda es el barco que está allí anclado vendiendo cervezas y comida a precios sorprendentemente bajos para el puntazo que es.
En Europa a cualquier ecologista le daría un ataque, aquí todos miramos hacia otro lado porque sentirse en el paraíso con una cerveza en la mano no tiene precio!
No dejéis de probar las lambrettas (10R$ la ración para 2). Son una especie de almejas brasileñas que están deliciosas! No son tan fuertes como las almejas, un poco más carnosas y con lima están para chuparse los dedos. Tomarlas con una cerveja bem gelada (8R$ la grande de 600ml) en una de sus mesas flotantes!