Para cenar esta noche os recomendamos el Ristorante Bianco e Nero, en la misma Vila. No tiene pérdida, en la calle principal que baja hacia las praias, a mano izquierda. La entrada es de madera con unas escaleras que suben porque las mesas están en una especie de terraza elevada. Perfecto porque estaréis en la misma villa pero sin el alboroto continuo de la calle.
Típico de Brasil, aquí se come bien porque lo llevan unos argentinos. Pero no os esperéis buena carne porque a Morro cuesta mucho que llegue, aquí lo bueno son las pastas. Deliciosos y muy curiosos los pene al pesto con marisco, aunque si no queréis algo tan arriesgado siempre podéis tomar la pasta fruti di mare (35R$). El marisco está siempre impecable de fresco y el servicio es rápido y muy atento. La garrafa de cerveza os saldrá por unos 7R$.